"Esperábamos más solidaridad de los alemanes, el hecho de que Rusia y Alemania planeen construir el segundo gasoducto Nord Stream sorteando a Polonia contradice los intereses polacos y aumenta la dependencia con respecto a Rusia", ha dicho el político y al afirmar que Alemania sigue siendo un socio importante para Polonia.
Anteriormente Letonia, Lituania, Estonia, Polonia, Hungría, Rumania y Eslovaquia enviaron una carta conjunta a Bruselas criticando el plan, que a su juicio puede aumentar la dependencia de Europa del gas ruso, debilitar la seguridad energética de los países de Europa Central y de toda la UE y provocar una mayor desestabilización en Ucrania.
El 4 de octubre se suscribió el convenio de los accionistas de la empresa mixta que se ocupará de las obras de construcción, que además de Gazprom son: New European Pipeline AG, E.On, Shell, OMV, BASF/Wintershall y Engie (ex GdF Suez).
Gazprom poseerá el 51 por ciento de las acciones del Nord Stream 2; E.On, Shell, OMV y BASF/Wintershall, el 10 por ciento cada una, y Engie, el 9 por ciento.