El acuerdo ha sido revelado aprovechando la visita a Estados Unidos del presidente chino, Xi Jinping, y muestra la importancia del mercado del gigante asiático en un sector que ha sido golpeado por la crisis global.
Los compradores son China Aviation Supplies Holding Company, ICBC Leasing Company y China Development Bank Leasing, según ha anunciado la agencia de noticias oficial Xinhua.
El medio no ha aclarado el importe de la operación, pero un comunicado del China Development Bank Leasing informa de la compra de 30 modelos de nueva generación 737-800 por tres mil millones de dólares.
El constructor también ha firmado con la Corporación de Aviación Comercial de China (COMAC, por sus siglas inglesas) la apertura de una planta de acabado de modelos 737.
El acuerdo revela los esfuerzos de Boeing por pelear el mercado chino con su rival europeo, Airbus, que ya dispone de una planta de construcción en la ciudad norteña de Tianjin.
La futura planta será la primera de Boeing fuera de Estados Unidos.
El constructor calcula que China necesitará 6.330 nuevos aviones para su flota comercial en 2034.
La industria local está desarrollando sus propios modelos para que rivalicen con Boeing y Airbus, pero el proceso se desarrolla más lento de lo esperado.
El sector aeronáutico en China se ha multiplicado en las últimas décadas debido al auge de la clase media.
