A pesar de poder ser considerada como un éxito de Rousseff, lo cierto es que la medida provisional 665 recibió los votos en contra de algunos senadores del propio Partido de los Trabajadores (PT), como Lindbergh Farias y Paulo Paim, quienes representan la facción dentro del partido contraria al plan de recortes de 23.000 millones de dólares del ministro de Hacienda, Joaquim Levy.
No obstante, la medida aprobada este martes resulta mucho menos agresiva que la propuesta originalmente por Levy, ya que únicamente se exigirá un año de trabajo cotizado para poder exigir el seguro de desempleo, es decir, 6 meses menos que los 18 meses propuestos por el gobierno en un principio.
Además, la votación en el Senado fue interrumpida al principio de la sesión por los abucheos de los representantes de Fuerza Sindical, sindicato asociado al Partido de la Social Democracia de Brasil (PSDB), mientras que miembros de la Central Única de Trabajadores (CUT) llegaron incluso a arrojar estiércol a los vehículos oficiales de algunos senadores, especialmente de los partidos de derechas.
Las votaciones de otras dos medidas del polémico plan de ajuste, acceso a la pensión por viudedad y baja laboral, serán votadas a lo largo de la semana, por lo que las tensiones podrían continuar entre los miembros del Ejecutivo y los miembros más progresistas del PT contrarios al giro neoliberal impuesto por Levy ante la crisis económica.