“El año pasado el intercambio comercial bajó el 21% hasta los 19.500 millones de dólares” a causa de la situación geopolítica, la situación económica rusa, las sanciones y la caída de los precios de petróleo, declaró.
Abramov subrayó que “las sanciones afectan la economía, pero podemos superar las dificultades”.
Al mismo tiempo, según el representante comercial, las exportaciones británicas a Rusia se redujeron el 3,8% hasta situarse en los 7.800 millones de dólares.
EEUU y la UE aprobaron varios paquetes de sanciones contra Moscú que afectan tanto a particulares como a empresas concretas y a sectores enteros de la economía rusa.
En respuesta, Rusia embargó por un año algunas importaciones de alimentos procedentes de EEUU, la UE, Australia, Canadá y Noruega.
La lista de artículos vetados incluye carne de res, cerdo, pollo, mariscos, verduras, frutas, quesos y productos lácteos, entre otros.