Con la cifra de noviembre, el IPC interanual mantiene su quinta pauta negativa. Sin embargo, el Gobierno del conservador Mariano Rajoy insiste en que la economía española no ha entrada en deflación.
El organismo atribuye esta caída al comportamiento de la vivienda por el abaratamiento de los precios de la electricidad, y al transporte por la bajada de los carburantes.
También ha caído el precio de algunas legumbres y hortalizas frescas.
El desplome del mes de noviembre es la segunda mayor tasa negativa del año y la séptima vez en catorce meses que "los precios muestran tasas interanuales negativas", según publicaron hoy los medios españoles.