La UE publicó el jueves una nueva lista de sanciones que incluye cinco bancos rusos; Sberbank por primera vez figura entre las instituciones sancionadas. Sin embargo los expertos rusos estiman que esta entidad financiera no se verá muy afectada y sus clientes podrían incluso ganar si eleva la tasa de interés.
Los cinco bancos, todos controlados por el Estado, –Sberbank, Vneshekonombank, VTB, Gazprombank y Rosselkhozbank– no podrán financiarse a más de 90 días en los mercados de la UE. A partir de este 1 de agosto, les está prohibido comprar o vender de forma directa o indirecta, contribuir a la emisión y realizar otras transacciones con títulos transferibles e instrumentos monetarios a más de 90 días.
Las restricciones también se aplicarán a las filiales de las instituciones (a condición de que su participación supere el 50%) registradas fuera de la UE, así como a las entidades que operen en nombre de los citados bancos.
Hasta el último momento no estaba claro si el mayor banco ruso, Sberbank, se incluiría en la lista. De todos modos, los mercados estadounidenses seguirán abiertos para él porque puede recurrir a la ayuda de su principal accionista, el Banco Central de Rusia.
Anoche Sberbank difundió un comunicado afirmando que no está involucrado en la política por lo tanto su inclusión en la lista “destruye las bases del funcionamiento del sistema financiero global y no contribuye a resolver la crisis europea en torno a la situación en Ucrania”.
A la vez, aseguró que dispone de recursos necesarios para continuar cumpliendo con sus compromisos ante los socios y clientes internacionales.
El analista de otra institución financiera, Rosbank, Evgueni Koshelev, opinó que los clientes incluso “pueden salir ganando porque la tasa de interés crecerá” pero advirtió de que las sanciones podrían afectar a los que contrajeron préstamos.
Mientras, VTB reaccionó de manera más emocional.
“Estas acciones se contradicen con los valores democráticos de los europeos que siguieron el rumbo de sus patrones transoceánicos en contra de sus propios intereses”, indicó al añadir que no modificará sus operaciones.
Por su parte, Rosselkhozbank y Gazprombank descartaron que las sanciones repercutan en sus actividades.
El miércoles el Banco Central de Rusia declaró que está dispuesto a apoyar a los bancos en caso de necesidad pero precisó que por el momento las entidades no requieren su asistencia y son capaces de superar los problemas.
