Las inversiones de Rosneft, mayor petrolera rusa, en el desarrollo del bloque Carabobo-2, sumarán 16.000 millones de dólares, informó el presidente de la compañía, Ígor Sechin, al reunirse ayer con el mandatario de Venezuela, Hugo Chávez.
Sechin, se encuentra actualmente en Caracas y el programa de su estancia incluye reuniones con Hugo Chávez, el ministro de Petróleo y Minería, Rafael Ramírez, así como la asistencia a una ceremonia solemne con motivo de la primera producción del crudo en Junín 6.
Rosneft participa en el proyecto Carabobo-2 de manera independiente, a diferencia del proyecto Junín 6 en cuyo desarrollo participa formando parte del Consorcio Nacional Petrolero (CNP) constituido por varias empresas rusas para implementar diversos proyectos en América Latina.
En octubre de 2011 Rosneft y la venezolana Pdvsa firmaron un acuerdo para explotar petróleo pesado en el campo de Carabobo 2, una de las cuatro áreas en que está dividida la Franja del Orinoco y una de las más ricas del mundo en reservas de crudo.
La compañía rusa posee el 40 por ciento de las acciones del proyecto Carabobo 2 y Pdvsa, el 60 por ciento. Las reservas geológicas en el campo petrolero ascienden a 5,1 mil millones de toneladas.
La franja del Orinoco, dividida en cuatro grandes áreas (Boyacá, Junín, Ayacucho y Carabobo), es una de las regiones más ricas del mundo en reservas de crudo.
Tiene unos 235 mil millones de barriles de petróleo pesado y superpesado. Actualmente las reservas de crudo probadas ascienden a más 171 mil millones de barriles. Se calcula que una vez terminada la certificación internacional de todos los campos petroleros de la franja del Orinoco, las reservas ascenderán a unos 314 mil millones de barriles de oro negro, gracias a lo cual Venezuela ocuparía el primer lugar a nivel mundial en reservas.
