"Desde el punto de vista jurídico la salida [de EEUU] no tiene mucha relevancia. Ya pasó con el protocolo de Kyoto cuando EEUU se retiró y el tratado sigue vigente". Honty se refería a la decisión del presidente George W. Bush en 2001 de abandonar ese tratado internacional, con el argumento de que dañaría gravemente la economía de su país. Lo que pasa es que le resta fortaleza frente a las exigencias hacia los demás países", indicó Honty.
El Acuerdo de París propone mantener el aumento de la temperatura debajo de los dos grados centígrados respecto a los niveles pre-industriales y limitar el calentamiento de la Tierra reduciendo las emisiones de dióxido de carbono provocadas por la quema de combustibles fósiles.
Durante la cumbre del G7 en Sicilia, el 26 y 27 de mayo, Trump se negó a apoyar el Acuerdo y dijo necesitar más tiempo para tomar una decisión. Días después el mandatario tuiteó que haría un anuncio esta semana.
"Voy a anunciar mi decisión sobre el Acuerdo de París en los próximos días. ¡Restauremos la Grandeza de Estados Unidos!", escribió en Twitter.
I will be announcing my decision on the Paris Accord over the next few days. MAKE AMERICA GREAT AGAIN!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) May 31, 2017
"El convenio de París de por sí es bastante débil. A pesar de las promesas realizadas por los adhirientes, el planeta está por encima de los dos grados de temperaturas [con respecto a la era pre industrial]. El impacto real es que esta decisión puede determinar que las políticas internas de los demás países cambien con respecto a este tema", explicó.
Y agregó que "está absolutamente demostrado que el cambio climático es real. La gran mayoría de los científicos están de acuerdo en la actualidad de que esto es así. Tomar la postura minoritaria es correr un riesgo inmenso. Los modelos del Panel Intergubernamental del Cambio Climático, que revisa toda la investigación académica del mundo sobre este tema, demuestran que sin la intervención del hombre la temperatura estaría un grado y medio o dos por debajo. El argumento contrario ha sido utilizado por sectores conservadores para mantener y justificar un estilo de producción y consumo vinculados a industrias como el petróleo", afirmó.