Tras el segundo set, la deportista —que ganó el partido por la retirada de la china— se acercó a Xinyu, de 17 años, la consoló y le pronosticó un gran futuro.
"Jugaste increíble. Increíble. Cuídate, ¿vale? Si sigues jugando así, vas a ser la número uno del mundo, te lo prometo", señaló Sharápova, sentada en el banco junto a su rival china.
El torneo de tenis femenino de Shenzhen se lleva a cabo durante la primera semana del año y está dotado con 750.000 dólares en premios.
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