El incidente ocurrió el 22 de julio, durante el enfrentamiento entre los equipos San Miguel y Defensores Unidos (CADU), de la cuarta división de la liga argentina. A los 12 minutos de juego, Isaías Olariaga, de San Miguel, y Javier Velázquez, del CADU, chocaron sus cabezas en un balón disputado.
A causa del impacto, Olariaga perdió el conocimiento y empezó a sufrir convulsiones. El árbitro, que también es socorrista, reaccionó de inmediato.
"Vi que el jugador de San Miguel estaba convulsionando e intervine. Cuando uno está boca arriba, la mayor causa de muerte es por la lengua, que impide que la persona pueda respirar. Lo que uno hace es ponerlo en una posición de seguridad, lateral, para que la lengua se corra y le permita respirar", explicó el héroe de la tarde a los medios.
Los médicos que acudieron poco después al lugar destacaron que el jugador sobrevivió gracias a la rápida asistencia del árbitro, pero su conducta ejemplar no termino ahí. Una vez finalizado el partido, se trasladó hacia el hospital, donde Olariaga quedó internado.
Una imagen suya a altas horas de la noche, acompañando a la madre del jugador, se volvió viral en las redes sociales.
El árbitro Yael Falcón Pérez acompañando a la mamá de Isaías Olariaga.Y ya son pasadas las 23. El árbitro no es Dios pero se ganó un alma pic.twitter.com/5nXse5Zl1D
— ELATLETICORADIO CASM (@ELATLETICORADIO) 23 de julio de 2017