El bogador ucraniano, quien ganó en Río de Janeiro su segunda medalla de oro, contó recientemente a los medios que en 2014 encargó una embarcación decorada con la imagen de un misil que estallaba sobre la ciudad de Moscú.
На этом каноэ Юрий Чебан завоевал золото на ОИ pic.twitter.com/kwduCWpEe3
— Типичный Чернобыль (@Petlurivetc) 18 de agosto de 2016
Sin embargo, en los Juegos Olímpicos, Chebán participó con otro esquife, cuyo diseño estaba en el marco de lo políticamente correcto: cosacos a caballo, galopando con espadas y mazos. Para el deportista es un símbolo de la independencia de Ucrania.
"A lo mejor, los atletas ucranianos sienten una especie de complejo de inferioridad", comentó al respecto el jefe de la Federación rusa de Remo y Piragüismo, Evgueni Arjípov, quien aseguró que los palistas rusos ni siquiera se dieron cuenta de las peculiaridades del equipo de Chebán.
Ucrania demostró en los JJOO 2016 el peor resultado de su historia, tanto por el número de medallas de oro, como por el número total de medallas y, en consecuencia, en el medallero. En total, el país eslavo ganó 11 preseas.
