Nazlymov subrayó que la mayoría de los deportistas rusos no está involucrada en la actual cuestión del dopaje, de modo que no se debería apartar al país de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
"Estoy orgulloso del pueblo ruso y del programa de esgrima que he ayudado a construir. Usted y yo sabemos que los esgrimistas, al igual que muchos otros atletas de otros deportes, tienen poco que ver con este escándalo", argumentó Nazlymov.
"Mi padre, un veterano de la Segunda Guerra Mundial que experimentó mucha injusticia antes y después de la guerra, siempre me dijo que hay que ir más allá de esa parte de nuestra historia y hacer un esfuerzo para construir el futuro sin este tipo de conflictos", escribió el tricampeón olímpico.
El esgrimista apuntó que el COI es el garante de los valores fundamentales del movimiento olímpico y debe actuar contra aquellos que corrompen estos principios. Por otro lado, recalcó que Bach es el guardián de todos los atletas y debe impedir que pase una injusticia.
"Entiendo que usted tiene que tomar una decisión difícil, la cual puede definir el movimiento olímpico de aquí en adelante. (…) Por favor, proteja los derechos de aquellos que no ansían nada más que la oportunidad de competir bajo la bandera de su nación", concluyó.
Nazlymov ganó el oro olímpico tres veces: en México 1968, en Montreal 1976 y en Moscú 1980. Además, se llevó dos medallas de plata, una en Múnich 1972 y la otra en Montreal 1976. También en Múnich, Nazlymov conquistó una presea de bronce.
El deportista vive desde los años 90 en EEUU, donde entrena el equipo de esgrima de la Universidad de Ohio.
El domingo, 24 de julio, será anunciada la decisión del COI respecto la participación de la delegación rusa en Río de Janeiro 2016.