Según Gunnell, el estado de Ali es estable, pero una "breve hospitalización es esperada".
Además, el portavoz ha pedido que la privacidad de la familia del deportista sea respetada en este momento.
El exboxeador estadounidense, que sufre de Parkinson, estuvo hospitalizado anteriormente en enero de 2015 debido a una infección del tracto urinario y en diciembre de 2014, por una neumonía.