"La Eurovisión, las competiciones deportivas, los contactos culturales y ahora los Juegos Olímpicos se convierten en rehenes de una nueva guerra fría contra Rusia", escribió en su cuenta de Twitter.
"Los Juegos (de 1984) fueron deficientes, nadie sacó provecho y ahora tampoco lo hará", agregó.
El jueves pasado, The New York Times publicó una entrevista al exjefe del laboratorio antidopaje de Moscú, Grigori Ródchenkov, quien acusó a 15 medallistas rusos de ser parte de un programa para el triunfo del país en los Juegos Olímpicos de Sochi de 2014.
El propio Ródchenkov, que actualmente reside en EEUU, fue destituido de su cargo en noviembre de 2015 después de que la WADA le acusara de destruir pruebas de dopaje tres días antes de una inspección.
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El presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach, no descartó que la selección rusa pueda ser expulsada de los JJOO 2016 de Río de Janeiro.
