Los lanzamientos "no son una respuesta a ningún acontecimiento en el mundo ni a situaciones de crisis en las regiones", destacó el servicio de prensa del Comando de Ataque Global de la Fuerza Aérea estadounidense.
El lanzamiento tuvo lugar desde la Base Aérea de Vandenberg, en el estado de California. El proyectil recorrió una distancia de 6.750 kilómetros y alcanzó el objetivo cerca del atolón de Kwajalei, que forma parte de las Islas Marshall, en el océano Pacífico.
Según los analistas estadounidenses, la Fuerza Aérea tiene ahora unos 400 misiles Minuteman III, con una carga nuclear de entre 300 y 335 kilotones cada uno. Están de servicio en las bases de Montana, Dakota del Norte y Wyoming. También existen otros 50 silos de reserva, donde los cohetes pueden ser instalados en caso necesario.