Se trata del Vehículo Interceptor Renovado (RKV), cuyo diseño fue clausurado debido a "problemas técnicos insuperables o prohibitivamente costosos de resolver", informó el Pentágono.
El objetivo principal del RKV sería la interceptación de las ojivas de misiles balísticos intercontinentales fuera de la atmósfera. Para el propio trabajo del diseño se subcontrató a la compañía Raytheon, especializada en la fabricación de proyectiles. Estaba previsto que 64 unidades del nuevo misil reemplazaran a los que están al servicio actualmente, los EKV.
Es uno de los elementos más importantes de todo el sistema de defensa antimisiles de EEUU, dado que interceptan los blancos enemigos por medio de un impacto directo. No obstante, durante las pruebas surgieron ciertos problemas técnicos, que debían resolverse con el interceptor actualizado.
Según informa el medio Defence News, ahora el Pentágono anunció otra licitación para el desarrollo de un misil interceptor completamente nuevo.
