El funcionario destacó que unas 5.500 personas, dos tercios de ellos hombres, se fueron de los países de la UE a territorios en guerra, unos 1.400 murieron y otros 1.600 regresaron a sus casas.
"Otros 2.500 permanecen sin estar registrados, no tenemos noticia de su paradero, y es posible que aún estén en las zonas de conflicto, pero quizás en otras", dijo el eurocomisario, agregando que uno de esos territorios puede ser Yemen.
King indicó que en la región podrían encontrarse unos 1.400 niños que tienen al menos un progenitor con ciudadanía europea.
Para el comisario de Seguridad, la presencia en Europa de unas 1.600 personas que combatieron en las filas de organizaciones extremistas representa una amenaza para la seguridad.