Tres personas familiarizadas con el asunto dijeron a este medio que Trump considera injusto el acuerdo, porque obliga a EEUU a acudir en ayuda de Japón en caso de ataque, pero no viceversa.
El mandatario estadounidense, que se verá esta semana con el primer ministro japonés, Shinzo Abe, en la cumbre del G20 en Osaka, no ha emprendido hasta ahora ninguna acción para cancelar el tratado, y funcionarios de su administración dudan mucho de que lo haga.
El tratado en vigor, firmado en 1960 en sustitución del pacto de defensa de 1951, permite a EEUU emplazar tropas en Japón a cambio del compromiso de defender a su aliado, si es atacado.