Es un lote sin precedentes que ningún otro país ha recibido previamente, opina el experto en materia militar Miroslav Lazanski.
El autor del artículo recuerda que siempre cuando las relaciones entre Washington y Ankara, o Washington y Atenas empeoran, EEUU arregla el problema suministrando armas a uno de los dos países.
"Una de las herramientas de la política exterior de EEUU vender o regalar armas a otros países. Un poco a los griegos, un poco a los turcos, todo depende de quién obedezca mejor al 'gran jefe' de Washington", ironiza.
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Una situación parecida puede observarse en las relaciones de Washington con Croacia y Serbia. A los estadounidenses no les gusta el hecho de que Rusia suministre armas a Serbia. Sin embargo, Washington no puede acusar abiertamente de eso a Moscú ni a Belgrado y por eso se comporta de la misma manera como en el caso de Grecia y Turquía.
Además, EEUU planea suministrar a Croacia 12 helicópteros UH-60M por valor de 63 millones de dólares hasta el 2025. Con ayuda de estos aparatos Zagreb planea renovar su parque de helicópteros soviéticos Mi-8 y Mi-17.
"Así es la política de Washington, lejos de llamarse fina, que incluye el envío de mensajes en el lenguaje de suministro de armas (…) Estamos viviendo en la época en que solo la potencia militar podría gozar del respeto. El más fuerte tiene la razón", concluye el columnista.
