"No hace falta declarar nada sobre S-400, este es un trato hecho. Es un caso cerrado. Turquía nunca ha roto sus promesas", dijo Cavusoglu.
El sistema antiaéreo S-400 Triumf (SA-21 Growler en la clasificación de la OTAN) es capaz de abatir aparatos aéreos de tecnología furtiva, misiles de crucero, misiles balísticos tácticos y táctico-operativos.
En diciembre de 2017, Turquía y Rusia firmaron un acuerdo para la compraventa de los sistemas S-400 por valor de 2.500 millones de dólares.
En este contexto, Washington exige a sus aliados turcos que abandonen los sistemas rusos a favor del análogo estadounidense Patriot.
El ministro de Defensa turco, Hulusi Akar, declaró previamente que Turquía comenzará el despliegue de sistemas S-400 en octubre de 2019.