De acuerdo con Zhirojov, los constructores soviéticos empezaron a desarrollar este proyecto a comienzos de los años 80 en la Oficina de Diseño Morozov de Járkov. Ellos planeaban equipar este tanque con un cañón de 152 milímetros, una cámara térmica y dotarlo con "diversos dispositivos electrónicos".
Zhirojov asegura que a mediados de los años 90 el Ministerio de Defensa de Rusia se interesó por el proyecto modificado del tanque Nota. En esta época los constructores ucranianos crearon aproximadamente una decena de maquetas del tanque y los enviaron para su análisis a Rusia.
Estos estudios no demoraron mucho tiempo ya que a comienzos del 2000 Moscú rechazó el Nota a favor del desarrollo de sus propios tanques y dejó de financiar el proyecto, asegura el periodista. Los constructores ucranianos de Járkov recuperaron el proyecto solo en 2015.
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Esto coincide con la controvertida opinión del ucraniano Serguéi Zguréts. Sin embargo, ambas consideraciones están lejos de la realidad, asegura en su blog Yuri Apujtin, extrabajador de la Oficina de Diseño de la ciudad de Járkov y quien participó en la implementación del proyecto Molot.
"Una completa generación de propagandistas que no son expertos en materia militar, de los que Zguréts también forma parte, ha aparecido en Ucrania en los últimos años. Ellos crean y difunden mitos sobre las potentes armas ucranianas sin entender nada de lo que escriben. (…) Siempre he defendido que la construcción de tanques nunca ha existido en Ucrania", arremete el bloguero.
Apujtin considera que al tergiversar los hechos históricos, estos autores tratan de vender la idea de que el Molot fue la implementación de la iniciativa ucraniana que en los años 90 pasó a llamarse Nota.
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Además, Apujtin destaca que realmente la creación del tanque empezó en 1979 y derivó del proyecto Buntar, cancelado en 1992 tras el derrumbe de la URSS y la incapacidad de Ucrania de implementarlo independientemente.
"La información que dice que el Ministerio de Defensa de Rusia se interesó por el proyecto es un tipo de delirio. Realmente, nunca se realizaron trabajos conjuntos entre Rusia y Ucrania en la esfera de construcción de tanques, dado que Moscú y Kiev se convirtieron en competidores tras el colapso de la URSS y Ucrania se negó a entregar los documentos respectivos a Rusia", señala el extrabajador de la Oficina de Diseño de la ciudad de Járkov.
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Por su parte, el experto en materia militar Konstantín Sivkov comparte la opinión de Apujtin. En un comentario para Sputnik, Sivkov estimó la posibilidad de que Ucrania construya tanques capaces de compararse con el Armata ruso.
"El Molot, elaborado en la URSS, realmente fue un prototipo del Armata por su potente cañón. Sin embargo, [los constructores ucranianos] necesitan bases científicas y técnicas para poder recuperar su producción", indica el experto a la vez que destaca que "Ucrania no goza de estas posibilidades".
Si bien el interlocutor de Sputnik admite que las autoridades ucranianas podrían contratar a especialistas extranjeros para desarrollar el tanque, esta jugada apenas podrá cambiar la situación en Ucrania.
"Necesitan plantas pero no tienen nada. Destruyeron y estropearon todas las fábricas. Anteriormente Ucrania gozaba del potencial suficiente para contrarrestar a Alemania. Es decir, el potencial económico de Ucrania superaba al de Alemania. Después se separaron de la URSS y ¿qué tienen ahora? Nada", concluye el especialista.
