"El proyecto prevé la creación de un aparato aéreo no tripulado que pesaría de cuatro a cinco toneladas y podría volar a una velocidad de entre 750 y 950 kiómetros por hora", precisó la fuente.
El futuro aparato, añadió, tendría un turborreactor que le permitiría duplicar la velocidad de los drones de hélice de clase similar.
La compañía se adjudicó el desarrollo del concepto en un concurso en el que participaron también las oficinas de diseño Yakovlev, Tupolev y Kronstadt.