Recientemente, los sistemas de lanzacohetes incendiarios TOS-1A participaron en el desfile militar celebrado en la capital iraquí de Bagdad con motivo de la victoria sobre Daesh —grupo terrorista, proscrito en Rusia y otros países—.
"Las ventajas del TOS-1A radican en el hecho de que este sistema se coloca sobre un bastidor de orugas: característica que le permite moverse junto con el tanque en una misma orden", explicó Leonkov a la agencia FAN.
El especialista destacó que el alcance del sistema es de seis kilómetros, mientras que la extensión de su zona de impacto alcanza los 40.000 metros cuadrados.
"Resulta que una unidad de estos sistemas puede crear un valladar de fuego. Simplemente reduce a cenizas todo lo que encuentra a su paso", afirmó.
Además, el experto mencionó que los ingenieros rusos diseñaron para los TOS-1A una gran variedad de municiones mortales de distinto uso. Según Leonkov, el Solntsepiok puede utilizar proyectiles termobáricos para provocar una explosión e incendiarios para crear una potente onda expansiva.
Irak pidió a Rusia producir y suministrar varios sistemas de lanzacohetes incendiarios TOS-1A en 2013. Las primeras unidades de Solntsepiok llegaron a Bagdad en julio de 2014.