En el simulacro, que terminará el 22 de julio, participarán las fuerzas navales, anfibias, aéreas y terrestres de Bélgica, Bulgaria, Canadá, EEUU, Francia, Georgia, Grecia, Italia, Lituania, Moldavia, Noruega, Polonia, Reino Unido, Rumanía, Suecia, Turquía y Ucrania, según el Mando Europeo de los Estados Unidos (Eucom).
El objetivo del ejercicio, que se celebra anualmente desde 1997, es mejorar la flexibilidad y la interoperabilidad, fortalecer la capacidad de respuesta combinada y demostrar la determinación de las partes para garantizar la estabilidad en la región del mar Negro.
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EEUU estará representado en el simulacro por unos 800 efectivos, además del crucero lanzamisiles USS Hue City, el destructor USS Carney y un avión de patrulla marítima P-8A Poseidon.
El centro de prensa de las Fuerzas Navales de Ucrania anunció a finales de abril pasado que esta edición de Sea Breeze, a diferencia de las anteriores, se desarrollará en forma de juego libre.
Por juego libre se entiende un simulacro militar en el que las únicas restricciones son las requeridas por las normas de seguridad en tiempos de paz, a diferencia de un ejercicio controlado en el que un organismo planificador impone limitaciones a algunas o todas las unidades implicadas, principalmente, para provocar diversas formas de interacción.