"En cuanto al uso de nuestras armas, en especial en la lucha contra los terroristas en Siria, me gustaría agradecer a los militares y los diseñadores de uno de nuestros nuevos sistemas Kh-101 (…) El misil mostró un alto grado de fiabilidad", indicó Putin. El presidente también instó a analizar la experiencia en combate para la posterior modernización de los sistemas existentes, así como el desarrollo de avanzados armamentos.
Pero, ¿cuál es el secreto de los misiles Kh-101? El uso de estos proyectiles en las operaciones terroristas en Siria puede ser considerado como una 'prueba de campo', aunque no se puede calificar de un ensayo 'válido' puesto que los yihadistas no disponen de sistemas de misiles equivalentes a los Kh-101.
Según declaró el teniente general Aitech Bízhev, ex comandante adjunto de la Fuerza Aérea de la Comunidad de Estados Independientes (CEI), estos misiles fueron diseñados para reemplazar a los misiles de crucero Kh-55 (AS-15 Kent, según la clasificación de la OTAN).
"Es un misil dirigido con precisión que tiene un alcance de hasta 4.500 kilómetros en condiciones de combate", explicó.
Los misiles estratégicos Kh-101 incorporan modernas tecnologías antirradar y están equipados con un sistema anticolisión. Así, el Strategic Culture Foundation informó que este avanzado proyectil ruso "podría ser capaz de corregir su trayectoria". Además de esto, utiliza un sistema de corrección de vuelo optoelectrónico en vez de un radioaltímetro. Gracias al sistema antirradar, el misil ruso es capaz de atacar objetivos enemigos a baja altura, así como esconderse detrás del terreno.
A su vez, Andréi Frólov, del Centro de Análisis de Estrategias y Tecnologías, afirmó que en comparación con las modificaciones anteriores, este misil tiene un mayor alcance, menor visibilidad, así como cuenta con más precisión y protección contra la interferencia enemiga.
"Un alcance de 4.500 kilómetros es un indicador muy serio para un misil guiado, y pocos países disponen de un armamento así", sostuvo.
Los Kh-101 pueden ser equipados con ojivas explosivas, penetrantes o de racimo y son capaces de portar hasta 400 kilogramos de explosivos. Los misiles de este tipo pueden ser instalados en los bombarderos rusos Tu-160, Tu-95MS16, Tu-22M3/5 y Su-34. Asimismo, pueden ser lanzados a una altura de entre 3.000 y 12.000 metros y a una velocidad de hasta 900 km/h.
En cuanto a los misiles Tomahawk, lanzados a bordo de los buques de guerra estadounidenses, pueden modificar sus planes de vuelo, al mismo tiempo, su velocidad, precisión y alcance son menores que los del misil ruso.
Por su parte, "los misiles Kh-101 y Kh-102 incrementan las oportunidades [de Rusia] de llevar a cabo ataques nucleares y no nucleares", concluyó Frolov.