Actualmente, los Tu-95MS reciben toda la información sobre sus objetivos antes del despegue del portamisiles. Con este nuevo sistema, la tripulación podrá controlar en tiempo real cuál es la situación en territorio enemigo.
Su funcionamiento es bastante simple: los soldados en tierra solicitan realizar un ataque aéreo y envían las coordenadas de las posiciones enemigas. El Subsistema de Cálculo de la nave más cercana que se encuentre en el aire traza la ruta del misil y carga la información al sistema de guiado del proyectil. Llegados a este punto, a la tripulación del 'Oso' solo le queda autorizar el lanzamiento.
En la actualidad, sistemas similares de SVP ya han sido instalados en las naves de ataque Su-24M, los cazas Su-33 y el bombardero estratégico supersónico Tu-22M. Según compartieron con Izvestia fuentes del Ministerio de Defensa de Rusia, este sistema ha demostrado su eficacia durante las operaciones de las Fuerzas Aeroespaciales de Rusia en Siria y ahora formará parte esencial de los planes de desarrollo de la aviación rusa.
Gracias al SVP, la aviación es capaz de acertar en los objetivos terroristas usando misiles convencionales, pero con una precisión no inferior a la de los misiles guiados.
El experto militar Antón Lavrov aclara que, para una persona no conocedora del asunto, podría parecer que se trata de un simple sistema de guiado más. Pero, en realidad, es mucho más que eso. Este es solo el primer paso hacia la creación de una sólida red de fuerzas, geográficamente dispersas pero bien interconectadas, que permitirá a todas las unidades de combate intercambiar información e interactuar entre sí en tiempo real.
