En el caso de que este proyecto reciba apoyo, Washington, de acuerdo con la legislación estadounidense, será capaz de lanzar operaciones especiales en los territorios de terceros países, señalan los analistas.
Moscú se muestra escéptica respecto a la propuesta estadounidense, dado que los grupos terroristas locales afiliados con las organizaciones mencionadas más arriba son muy pequeños en número. Así, los Gobiernos de los respectivos países pueden acabar con esta amenaza sin la injerencia de ninguna potencia extranjera, añaden las fuentes.
En junio de 2017, la Asamblea General de la ONU aprobó la creación de un nuevo organismo que estará a cargo de la lucha antiterrorista. La nueva estructura, que recibió el nombre de Oficina Antiterrorista de la ONU, está encabezada por el diplomático ruso Vladímir Voronkov.
La tarea principal del nuevo departamento es la unificación del término 'terrorismo' y la creación de una lista de organizaciones terroristas y delincuentes fichados. Los medios ya habían informado con anterioridad que Moscú prevé crear su parte del listado y presentarlo ante el nuevo organismo de la ONU.