Durante la anterior visita que realizó a Estados Unidos entre el 12 y 16 de junio, Parubi urgió a Washington a firmar un acuerdo en materia de seguridad sin dar más detalles.
"El acuerdo contempla (…) el despliegue de las reservas militares de Estados Unidos en el territorio ucraniano", reveló el titular del Legislativo en declaraciones recogidas por la edición Levi Bereg.
Desde abril de 2014 el Ejército ucraniano lleva a cabo una operación militar en las provincias orientales de Donetsk y Lugansk, donde se proclamaron repúblicas populares en respuesta al cambio violento de Gobierno ocurrido en Kiev en febrero de ese mismo año.
Las hostilidades han causado más de 10.000 muertos, según datos de la ONU.
Nuevos bombardeos
Los tropas del Gobierno lanzaron más de 250 proyectiles contra las zonas residenciales de Donetsk.
Desde Lugansk denunciaron también que las fuerzas de Kiev rompieron seis veces el alto el fuego al bombardear las localidades de Sokolniki, Frunze, Slavianoserbsk, Zhéltoe y Golubovski.
La ofensiva de Poroshenko
Los bombardeos del Ejército ucraniano se intensifican en medio del viaje del presidente del país, Petró Poroshenko, a Estados Unidos.
El líder ucraniano calificó de importante que su reunión con el mandatario norteamericano, Donald Trump, se celebre antes que la del presidente ruso, Vladímir Putin.
"Ucrania goza de un fantástico apoyo de EEUU, es muy importante que mi encuentro en la Casa Blanca tenga lugar antes que con Putin", tuiteó Poroshenko.
Así, el titular del Interior, Arsén Avákov, calificó al republicano de "marginado peligroso".
El secretario del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa, Alexandr Turchínov, caracterizó a Trump como un "tipo peligroso".
El ex primer ministro Arseni Yatseniuk le tachó de "criminal desafiante".
La victoria de Trump sorprendió a los políticos ucranianos que se apresuraron a borrar sus publicaciones contrarias al candidato republicano.