Aunque el Gobierno tunecino niega que Estados Unidos haya desplegado drones en su territorio, hay señales de que el país norteamericano está expandiendo su red de bases de aviones no tripulados en el norte de África.
"Los informes de que Túnez permitió que Washington utilizara una base militar para enviar drones a Sirte (Libia) con el objetivo de llevar a cabo operaciones militares contra Daesh carecen de fundamento", expresó el portavoz del Ministerio de Defensa tunecino, Belhassen Oueslati, a Sputnik. "Negamos estos informes y no tenemos ninguna base militar estadounidense en Túnez, es solo una especie de cooperación, una operación de entrenamiento conjunta", agregó.
Los aviones no tripulados Air Force Reaper comenzaron a volar fuera de la base tunecina a finales de junio y han jugado un papel clave en una prolongada ofensiva aérea estadounidense contra una base de Daesh —organización terrorista proscrita en Rusia y otros países— en Libia, publicó el periódico.
En su artículo para New Eastern Outlook, el analista geopolítico Martin Berger sugirió que los representantes del Gobierno tunecino trataron de ocultar el hecho de que el Pentágono estaba usando sus bases para drones, "puesto que está claramente preocupado por la posible indignación de la población".
Sin embargo, la base de aviones no tripulados en Túnez parece formar parte de un plan más amplio, ya que, anteriormente, el periodista y escritor estadounidense Nick Turse había escrito sobre el establecimiento de una nueva base norteamericana de drones en Agadez (Níger). Mientras se cree que EEUU está operando un puñado de bases en África, Turse reveló que hay docenas de instalaciones militares en la región que pertenecen al país norteamericano. Y su número está aumentando constantemente.