Al polígono Raieveski, ubicado cerca de Novorossiysk, acudieron el ministro de Defensa de Rusia, general de Ejército Serguéi Shoigú, y el comandante del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia, general de Ejército Valeri Guerásimov, así como altos mandos militares.
Durante la visita Shoigú entregó la orden de Suvórov a la 7ma División de Asalto, tras lo cual junto a sus viceministros y un grupo de generales y oficiales del Estado Mayor trabajó en el polígono de combate de Raievski, de donde se pudo escuchar un intenso fuego de diversos sistemas de armamentos.
Según informó una fuente del complejo industrial militar, en el polígono Raievski se realizaron exitosamente las pruebas de los equipos multifuncionales robotizados del tipo Urán.
La fuente explicó que si antes los robots de combate pasaban las pruebas en solitario, en esta ocasión los equipos robotizados cumplieron misiones como parte de unidades en el polígono de Raievski.
"Durante las pruebas realizadas en el polígono Raievski se llevaron a cabo misiones de exploración ingenieril del terreno, así como la destrucción de objetivos a distancias límites desde distintos sistemas de armas, tanto ametralladoras como cañones automáticos".
"En la etapa final de los ejercicios los robots de combate practicaron tareas de destrucción de equipos blindados por medio de misiles guiados antitanque", explicó la fuente de la agencia.
La fuente subrayó que los operadores dirigían los complejos robotizados desde un punto de control protegido y ubicado a una distancia considerable.
"Todos los objetivos fueron eliminados con éxito por los operadores de los equipos robotizados", concluyó la fuente.
