"Las tripulaciones realizarán prácticas de tiro con torpedos y artillería naval, se ejercitarán en colocar minas submarinas y practicarán técnicas de defensa contra ataques aéreos", señala el comunicado.
Además, las unidades de Infantería de Marina desembarcarán en una costa no acondicionada y atacarán posiciones del adversario ficticio, agrega la nota.
Las maniobras se enmarcan en una inspección sorpresa iniciada en la Flota rusa del Norte.
Después de la época soviética, las inspecciones sorpresa se retomaron en Rusia en 2012, poco después de que Serguéi Shoigú asumiera el cargo de ministro de Defensa.
Según expertos, las inspecciones permiten mejorar de manera considerable la interacción de distintas unidades de las Fuerzas Armadas de Rusia.
Inspecciones similares se efectúan cada año además de unos 3.500 ejercicios de distinto nivel.