La base militar estadounidense desplegada en el aeropuerto internacional de Manas, en la capital kirguís, no será retirada hasta 2014, año en que vence el contrato firmado entre ambos países, afirmó hoy la presidenta saliente de Kirguizistán, Rosa Otunbáyeva.
“Hasta 2014 indudablemente permanecerá allí”, declaró Otunbáyeva, cuyo mandato presidencial termina el próximo 31 de diciembre, durante una rueda de prensa en la sede de la ONU.
Según explicó, la base tiene un papel importante ante la actual evolución de la situación en Afganistán.
Al mismo tiempo, la líder kirguís respaldó la idea de convertir la base en un aeropuerto civil propuesta por el presidente electo, Almazbek Atambaev.
“Es una buena idea, y quisiéramos utilizarlo para el transporte de mercancías”, indicó.
Tras vencer en las elecciones presidenciales del pasado mes de octubre, el actual primer ministro kirguís, Almazbek Atambaev, abogó por la retirada del territorio nacional de la base aérea estadounidense desplegada en Manas.
Según argumentó, la base de EEUU no garantiza la seguridad del país centroasiático y además podría ser objetivo de un ataque de respuesta de algún país. No obstante, aseguró que se respetarán todos los acuerdos internacionales firmados por Kirguizistán.
La base aérea del Pentágono fue desplegada en el aeropuerto internacional de Manas, ubicado en Bishkek, en 2001 en el marco de la operación militar “Libertad Duradera” en Afganistán.
Rebautizada posteriormente como Centro de Tránsito de Cargas, es un punto clave para el transporte de material militar y soldados estadounidenses hacia los correspondientes destinos en Afganistán.