Leche de alce: cómo preparar el "cóctel que puede pacificar a un ejército"

"Un cóctel que puede pacificar a un ejército". Esa podría ser la descripción del elixir que bebían los militares canadienses en los días de invierno durante la Segunda Guerra Mundial para mantenerse satisfechos, calientes, tranquilos y… ¿borrachos? Sea cual fuere el motivo, lo cierto es que los soldados lo preparaban constantemente. ¿Qué es?

Crema, yemas de huevo, azúcar y licor (a veces kahlúa también) son los ingredientes del potente cóctel que bebían los soldados: la leche de alce. El Ejército canadiense se adjudica la invención de la bebida, aunque cada fuerza tiene su propia versión con diferentes tipos de licores (pues claro, no siempre se tenía a mano whisky, ron, vodka). 

Hoy, la leche de alce se sigue consumiendo en las reuniones militares y es un cóctel de brindis durante las fiestas navideñas y de Año Nuevo. Mientras que para dar un espesor dulce y cremoso las recetas históricas requerían batir las yemas de huevo con azúcar, las versiones más modernas a menudo lo sustituyen por helado de vainilla.

A #PancakeDay tradition at @RHChelsea w/ @CanadianUK joining for some pancake flipping, moose milk sipping and a strengthening of ties between our two nations, over a shared #PancakeBreakfast with Canadian (of course!) maple syrup 🇨🇦🇬🇧 pic.twitter.com/0HAM6qiFDd

— The Chelsea Pensioners (@RHChelsea) February 13, 2018

¿Cómo se prepara la leche de alce?

Los ingredientes necesarios para preparar la poderosa leche de alce son:

En un tazón, vierte todos los ingredientes (excepto los utilizados para adornar) y bátelos con ímpetu. Déjalo reposar un minuto, para que el helado se derrita. Cubre la mezcla con la nuez moscada o las virutas de chocolate negro. ¡A disfrutar!

*Si estás decidido a preparar la leche de alce como realmente lo hacen los militares, pues dobla la cantidad de alcohol.