"El arte está de luto. Ha fallecido el maestro Francisco Toledo, oaxaqueño, gran pintor y extraordinario promotor cultural, auténtico defensor de la naturaleza, las costumbres y las tradiciones de nuestro pueblo" escribió en un mensaje en sus redes sociales el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador.
El artista era originario de Juchitán, un vigoroso polo de las culturas ancestrales del sur de México en las costas del estado de Oaxaca, frente al océano Pacífico.
Cerca de la medianoche del 5 de septiembre fue instalada una ofrenda abierta en el Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca, la ciudad colonial fundada en el siglo XVI donde vivió sus últimos años, formada por los elementos de las tradiciones de la cultura juchiteca y oaxaqueña.
Una pequeña foto del artista, una mazorca de maíz morado y una calavera de azúcar rodeada de flores multicolores fueron colocadas como símbolo de su vida.
A los tres años de terminar sus estudios en París presentó su primera muestra en una galería de la capital francesa, obra que después expuso en la famosa Tate Gallery de Londres.
En una entrevista reciente con el periódico La Jornada, del cual fue fundador en 1984, el artista exclamó "¿Vivir 100 años? ¡No, no! Eso es para gente ordenada, tranquila, trabajadora. ¿Quién de Juchitán ha durado mucho?".
Toledo falleció de cáncer de pulmón que combatió en los últimos meses.