"No creo que el trabajo haya convertido al mono en humano, pero sé con seguridad que la fama convierte al hombre en un mono", escribió Zajárova en su cuenta de Facebook.
Así comentó un artículo publicado en la prensa que analiza cómo algunas celebridades enloquecen por la fama y empiezan a pensar que son superhéroes.
"El proceso de perder la calidez humana comienza cuando un personaje mediático empieza a presentar el resultado del trabajo de un colectivo, a menudo muy numeroso, como suyo, como el fruto de sus propias características individuales, de su 'gen de belleza' y carisma. Por supuesto, la belleza y el carisma existen y mucha gente famosa trabaja 24/7. Sin embargo, para ser vistos y amados por las masas, es necesario el trabajo de un gran número de personas", subrayó Zajárova.
Escribió tres premisas para todos aquellos que aspiran a convertirse en una celebridad:
- Eres único, como cada uno de los miles de millones de seres humanos.
- Debes tu popularidad a una cadena muy larga de personas porque si no hay electricidad, no habrá televisión, y si no hay maquillador, la electricidad tampoco ayudará.
- No creas en el éxito, especialmente en el tuyo. Hay que creer en algo más sólido, al menos en el amor cotidiano, continuo, igual para todos.
