En concreto, indica que este año la gala atrajo a 34,3 millones de telespectadores, lo que es un 9 por ciento menos que el año pasado y la menor cantidad entre las celebradas desde 2008.
La ceremonia de entrega de los Oscar de 2017 también fue la más larga de los últimos diez años, pues su transmisión duró tres horas y 49 minutos.
La edición más exitosa todavía se considera la de 2000: el número de las personas que vieron la gala superó 46,5 millones de personas.