Las empanadas latinas triunfan en el mercado estadounidense

En EEUU, la tierra de las hamburguesas y otras comidas rápidas, muchos comensales son seducidos por el irresistible sabor de las empanadas latinoamericanas.

Ya sean dulces, saladitas o picantes, estos productos nacidos en el corazón de Suramérica, en su mayoría, son una tentación para el paladar de millones, no importa si son inmigrantes o nativos, según destaca la BBC.

Son muy distintas y de disímiles procedencias —las hay argentinas, bolivianas, brasileñas, chilenas, colombianas o venezolanas—, pero todas las empanadas son deliciosas y actualmente las puedes encontrar en cualquier punto de la geografía norteamericana.

Su variedad, fácil elaboración y su calidad han posibilitado que se conviertan en alternativa a la comida rápida que abunda en EEUU. Por eso se le puede encontrar en cadenas de supermercados, restaurantes latinoamericanos, ferias e incluso en los famosos "food trucks" (camiones de comida).

Populares en toda Suramérica, las empanadas argentinas, rellenas con pollo, carne, chorizo, jamón y queso o espinaca y ricota (requesón); son símbolo de ese país y ya también, muy degustadas por los norteamericanos.

En la sureña ciudad de Miami está el Graziano's, que según la BBC, produce hasta 15 variedades y presume de tener "las mejores empanadas argentinas de la urbe".

Otra que llegó para quedarse es la salteña boliviana, el desayuno por excelencia para los paceños y en general muy apreciadas en la nación andina. Con la llegada de miles de bolivianos a EEUU, sobre todo en la década de los 80 y 90, también trajeron sus costumbres.

En 1999 Luzmila Ampuero, residente en el estado de Virginia —donde se estima que viven alrededor de 200.000 bolivianos—, comenzó a preparar las empanadas favoritas de casi todos sus compatriotas y tras casi 20 años, sus salteñas son una leyenda entre los residentes. Al día venden unas 500 en sus dos variedades, de pollo y de res.

Mientras que las empanadas de pino de Chile —rellena de carne picada, cebolla, huevo y pasas—, tienen en Los Andes Bakery a uno de sus más grandes exponentes, y sus sucursales en Nueva Jersey y Nueva York, son puntos de encuentro imprescindibles para los residentes chilenos en esos estados.

"Pero nuestros clientes no son sólo chilenos", afirma Jessica Mejías, dueña de la panadería que funciona desde hace más de 30 años en Estados Unidos. "También tenemos muchos consumidores latinoamericanos y 'gringos' a los que les gustan las empanadas de pino", afirma Mejías quien está en el negocio desde 1984.

Tampoco se quedan atrás las empanadas venezolanas y colombianas, que también se consiguen en EEUU y no sólo en restaurantes de comida latinoamericana.

Destaca la agencia británica que en un camión de comida en Orlando, se pueden encontrar empanadas venezolanas, rellenas con carne mechada, queso, frijoles y plátano maduro. Mientras que en supermercados de Seattle están a la venta las empanadas colombianas, llamativas por su color amarillo.

A estas se unen las coixinhas, unas empanadas brasileñas que son redondas y están rellenas con pollo y las empanadas de viento ecuatorianas, con abundante queso.

Nada, que si tenemos en cuenta la cantidad de personas y de culturas que convergen dentro de EEUU, podemos decir que las empanadas latinoamericanas son uno de los bocados más universales en la actualidad.