PEKÍN (Sputnik) — El presentador, Chris Rock, introdujo en el escenario a tres niños asiáticos vestidos con frac y los calificó como los empleados "más entregados, rigurosos y trabajadores".
El diario ultranacionalista Global Times ve en esos chistes los estereotipos del trabajo infantil en Asia y denuncia que los "asiáticos fueron un objetivo fácil para reírse de ellos".
La gala de los Oscar de este año estuvo precedida por una campaña de boicot debido a la escasa presencia de actores negros en las nominaciones, lo que derivó en un debate social.
"La discriminación contra los africano-americanos ha recibido gran atención. Oponerse a esa desigualdad y reducirla se ha convertido en un asunto de relevancia política. Pero la discriminación contra los asia-americanos, también muy presente en la sociedad estadounidense, ha recibido mucha menos atención", asegura el diario.
También denuncia que la discriminación contra los asiáticos "está aún tolerada" y que esta comunidad debería movilizarse para acabar con ella.
La comunidad internauta en China ya había protestado tras la gala por los chistes sobre los asiáticos.
Entre las voces más célebres figura Jeremy Lin, el baloncestista de los Charlotte Hornets, quien envió un tuit calificando de "muy grave" lo ocurrido: "¿Cuándo va a cambiar esto? Estoy cansado de que sea guay y aceptable burlarse de los asiáticos".
"Siento que a veces la forma en la que la gente percibe a los asiáticos o a los asiático-estadounidenses puede ser decepcionante con respecto a la manera en la que ellos mismos se perciben", agregó días después.
La comunidad china ya se ha levantado contra otros capítulos supuestamente jocosos en televisiones extranjeras.
Tres años atrás hubo un escándalo mayúsculo cuando un niño, preguntado en el célebre programa de la ABC estadounidense Jimmy Kimmel Live! sobre cómo podría Washington pagar la deuda a Pekín, respondió "matando a todos los chinos".
También series humorísticas españolas han generado la polémica en China al utilizar estereotipos de ese país.
