Ahora, los científicos han confirmado la existencia de un monstruo marino en esta zona que puede ser realmente peligroso para los seres humanos y demás animales.
Los biólogos marinos han estado desconcertados durante años por una serie de extrañas marcas observadas en criaturas que habitan aquí. En el programa Tiburones del Triángulo de las Bermudas de National Geographic acabaron por descifrar este misterio.
Entre la población de tiburones que viven allí, uno pequeño se destaca por sus audaces ataques. Es conocido como tollo cigarro (o tiburón de corte de galleta) y es un animal aterrador con un nombre engañosamente dulce.
Este tiburón raramente fotografiado realiza dramáticas migraciones verticales. Durante el día, habita en profundidades de un kilómetro, pero por la noche sube medio kilómetro para cazar. Solo crece hasta 50 cm, pero tiene la audacia de atacar ballenas, atunes e incluso grandes tiburones blancos. La prueba está en las heridas que deja en sus víctimas, un agujero con forma de galleta.
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