Los investigadores del proyecto indican que todavía no se ha logrado hallar las partículas deseadas. No obstante, el estudio admite la existencia de partículas pesadas.
"Incluso disponemos de pruebas [de su existencia], si bien carecen de relevancia estadística (…) Quisiera creer que esto no es casualidad", manifestó la representante del proyecto italiano Xenon1T Elena Aprile.
Los científicos opinaban desde hace mucho que el universo consta de materia visible que sirve de base para todas las estrellas, los agujeros negros, los planetas y varios otros objetos espaciales.
Entonces los científicos sugirieron que el fenómeno se debía a la así llamada materia oscura. La misteriosa sustancia representa un 75% de la masa total del universo y funciona como una especie de imán que no permite que las estrellas abandonen su sitio, según teorizan.
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Hoy en día la mayoría aplastante de los investigadores admite la existencia de la materia oscura, pero sus características todavía son objeto de controversia.
Gracias al Xenon1T se ha conseguido descartar la existencia de partículas ligeras. Ahora los científicos pretenden modificar el equipamiento y centrarse en la búsqueda de partículas más pesadas. Está previsto que los primeros resultados lleguen en 2019.
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