Previamente, Pompeo había declarado que EEUU rechazaba el enfoque de la Administración Obama. Según el anterior Gobierno norteamericano, los asentamientos desplegados por Israel en Cisjordania y Jerusalén Este eran una violación del derecho internacional. Según Pompeo, este cambio de postura de Washington no influye en el estatus de las fronteras entre Israel y Palestina, que debería ser determinado por la vía de las negociaciones.
"Advertimos acerca del peligro que podría surgir a raíz del cambio de postura de EEUU y el atentado contra todos los esfuerzos emprendidos en aras de conseguir la paz", escribió.
El despliegue de asentamientos en Cisjordania y Jerusalén Este realizado por Israel ha sido considerado como uno de los mayores factores irritantes entre los que existen hoy en día en las relaciones entre Israel y la comunidad internacional. Aparte de eso, es uno de los principales obstáculos que impiden establecer la paz con los palestinos.
Desde Palestina consideran que las actividades del país hebreo forman parte de una política que permite a Israel consolidar sus posiciones en los territorios ocupados hace más de medio siglo.
