Ahora, un reciente video muestra como el gigante informático Google altera los resultados de búsqueda para hacer lucir bien a la candidata demócrata, ocultando la información que podría perjudicarla.
Esto podría parecer una buena intención de no ser por el reciente estudio de Robert Epstein, sicólogo, periodista y profesor de la Universidad de California en San Diego, que revela como tales manipulaciones podrían tener un impacto directo en las urnas.
Otras publicaciones de medios estadounidenses resaltan que la frecuencia con la que los empleados de Google visitan la Casa Blanca supera 10 veces la cifra promedio para una compañía de esa magnitud, además de documentar que hasta 250 personas habrían ocupado e intercambiado cargos tanto en la administración del presidente Barack Obama como en Google.
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