La entrevista tendrá lugar al margen de una reunión trilateral con el jefe de la diplomacia china, Wang Yi. El anterior encuentro entre Kang y Kono tuvo lugar el 1 de agosto, paralelamente a un foro regional en Bangkok.
El presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, instó a mediados de este mes a Japón a no utilizar el comercio como arma en detrimento de otros países, y afirmó que Seúl se uniría con gusto si Tokio optara por la vía del diálogo y la cooperación.
A principios de julio pasado, Japón limitó el suministro a Corea del Sur de tres componentes químicos necesarios para la fabricación de semiconductores y equipos electrónicos, y en agosto anunció que eliminará a Corea del Sur de la lista de naciones que gozan de preferencias en materia del control de exportaciones.
Tokio alega que Seúl no asegura el control pertinente sobre las tecnologías de doble uso.
La cancelación recíproca de preferencias, que se hará efectiva en las próximas semanas, implicará para ambas partes la obligación de solicitar permiso cada vez que adquieran productos y tecnologías de doble uso, trámite que suele prolongarse por mucho tiempo.
El endurecimiento del control de exportaciones afecta más a Corea del Sur que cerró el pasado año con un déficit de 24.100 millones de dólares en el comercio con Japón, correspondiendo un 93% de esta suma al apartado de materiales, componentes y equipos industriales.