Se agrega que los heridos ya fueron hospitalizados, no hay informaciones sobre fallecidos por el momento.
Según las informaciones previas, explotó una bomba casera y luego los atacantes y los militares iniciaron un tiroteo.
Las relaciones entre la India y Pakistán vivieron un brote de tensión después de que un terrorista suicida atacara el 14 de febrero un convoy policial en este mismo distrito indio, causando 45 muertos y decenas de heridos. El atentado fue reivindicado por el grupo terrorista Jaish-e-Mohammed (JeM), cuyo líder Masood Azhar se oculta en Pakistán.
El 26 de febrero, la India bombardeó supuestas bases de JeM en territorio pakistaní, afirmando que era una "acción no militar preventiva" y "absolutamente necesaria" debido a que el grupo estaba planeando más ataques.
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Al día siguiente, aviones militares de Pakistán y la India protagonizaron un combate aéreo en Cachemira, el primer incidente grave desde la guerra indo-pakistaní de 1971.
