Las lluvias no paran en la región desde el 7 de junio, y afectaron a más de 500.000 habitantes de 23 distritos de la provincia, con daños económicos directos estimados por las autoridades locales ya en 670 millones de yuanes (94 millones de dólares).
Hasta la fecha, más de 50 edificios ya han sido destruidos debido al aumento del nivel del agua, casi 90 edificios han sido seriamente dañados, y 1.200 de habitantes locales necesitan ayuda de emergencia.
La inundación causó daños significativos a las tierras agrícolas, fueron inundadas más de 37.000 hectáreas de tierras de cultivo.
Según los meteorólogos, las lluvias continuarán hasta el próximo martes.
No hay informes de muertos o heridos.