"El Gobierno trabajará estrechamente con Estados Unidos y otros países para recopilar y analizar la información necesaria y monitorear la situación", afirmó Iwaya, citado por el canal NHK News, al reunirse con los miembros de un comité de la Cámara Alta.
Fuentes de la oficina del primer ministro Shinzo Abe, en declaraciones a la agencia Kyodo, supusieron que Corea del Norte ensayó su nueva arma convencional para impresionar a EEUU, alternando como siempre la línea dura con una postura atenuada, y que no se trata de un misil de largo alcance.
"Lo único en que piensan ahora es en la negociación con EEUU", opinó una fuente.
Expertos consultados por los medios surcoreanos opinan que la nueva arma podría ser un misil de crucero o un misil de corto alcance, y que la presencia de Kim en el ensayo buscaba enviar un mensaje de advertencia a EEUU sin provocar demasiado.
"Kim está tratando de decirle a la administración Trump que su capacidad militar está creciendo día tras día, y que su régimen empieza a sentirse frustrado por la falta de flexibilidad de Washington en las negociaciones recientes", cita la agencia Yonhap a Harry Kazianis, director de estudios coreanos del Center for the National Interest (CFTNI) con sede en Washington.
Más aquí: ¿Perdió EEUU la "oportunidad dorada" de ponerse de acuerdo con Corea del Norte?
La semana pasada, Kim Jong-un expresó su disposición para reanudar con Trump el diálogo sobre la desnuclearización, siempre y cuando EEUU asuma "una actitud correcta", y anunció que Pyongyang esperará "con paciencia" hasta el final de este año.