Los despachos al país norteamericano ascendieron a 175.500 millones de dólares, mientras que las importaciones se situaron en 70.300 millones.
A mediados de mayo tras una ronda de negociaciones los dos países concordaron adoptar medidas eficaces para reducir el déficit.
El secretario de Comercio de EEUU, Wilbur Ross, visitó China al frente de una delegación del 2 al 4 de junio para continuar las negociaciones comerciales.
Más: China resiste el envite de la batalla comercial
Los negociadores no llegaron a ningún acuerdo, Pekín pidió a Washington concesiones mutuas para incrementar las importaciones procedentes de Estados Unidos.
Además, la administración estadounidense aplicará restricciones a las inversiones y recrudecerá los controles de exportación a ciudadanos y entidades chinas relacionadas con la adquisición de tecnología industrialmente significativa a partir del 30 de junio.