El portavoz del organismo, Bahram Qasemi, informó en su canal en Telegram que el asesor del canciller iraní, Mahmud Farazande, citó al embajador surcoreano, Kim Seung-ho, para expresarle "su protesta ante el gesto poco ético que contradice el espíritu de los Juegos Olímpicos".
El ente diplomático advirtió a Kim de que si Samsung no pide disculpas por el "paso imprudente", eso afectará las relaciones de negocios entre la compañía e Irán.
La agencia de noticias IRNA, a su vez, informó que el canciller iraní, Mohamad Yavad Zarif, anunció que dejará de usar el teléfono Samsung si la compañía no pide disculpas hasta la noche de 8 de febrero.
Un día antes la agencia surcoreana Yonhap informó que Samsung Electronics en calidad de patrocinador entregó a los organizadores de los JJOO unos 4.000 teléfonos Galaxy Note 8 de la colección Olympic Edition como regalo a los competidores en Pyeongchang.
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Sin embargo, el Comité que organiza la Olimpiada decidió que los dispositivos no se entregarán a los atletas iraníes y norcoreanos por las sanciones que prohíben suministrar a sus países objetos y productos de lujo que puedan utilizarse con fines militares.