Un funcionario marítimo, citado por el canal Press TV en Twitter, confirmó la muerte de todos los miembros de la tripulación.
"No hay esperanzas de encontrar con vida a los otros miembros de la tripulación", reconoció Mohammad Rastad, portavoz del equipo de rescate iraní enviado a Shanghái.
Dos terceras partes del petrolero, según él, ya están sumergidas en el agua.
El Sanchi, que navegaba bajo bandera panameña, colisionó el 6 de enero con la nave de carga china CF Crystal, matriculada en Hong Kong.
A bordo del petrolero, que transportaba a Corea del Sur 136.000 toneladas de material altamente inflamable, el condensado de petróleo, había 32 tripulantes: 30 iraníes y dos nacionales de Bangladés.
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La colisión provocó un incendio que no se pudo apagar en los días posteriores. El 14 de enero por la mañana el fuego se propagó a los tanques de condensado en el lado izquierdo de la nave generando llamas de hasta 100 metros y elevando la temperatura a 350 grados Celsius.
Por su parte, el canal chino CCTV informó que la nave se sumergió casi por completo y en la superficie marina solo se ven algunos fragmentos y el combustible que sigue ardiendo.
El naufragio dio origen a una mancha negra que en los últimos dos días se extendió de tres a diez kilómetros cuadrados, según este medio.
