"No hay ninguna actividad que pueda llevar a concluir que es inminente una provocación de misil por parte de Corea del Norte", afirmó el portavoz del ente, coronel Roh Jae-cheon, citado por Yonhap.
La autoridades militar surcoreana hizo estas declaraciones después de que los medios estadounidenses informaran de que Pyongyang se preparaba aparentemente para disparar otro misil balístico intercontinental.
Seúl y Washington están vigilando de cerca la situación, agregó.
La cadena CBS News comunicó que Corea del Norte reanudó supuestamente la actividad en la misma instalación de la que disparó un misil balístico intercontinental en noviembre.
A su vez, Newsweek informó citando a funcionarios norteamericanos que Pyongyang podría llevar a cabo un nuevo ensayo de misil próximamente.
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La embajadora de EEUU ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Nikki Haley, declaró el pasado día 2 que Washington está al tanto de que Corea del Norte se encontraría preparando otro ensayo con misiles balísticos.
Fue el primer misil lanzado por los militares norcoreanos desde el 15 de septiembre, aunque en los meses anteriores había realizado una quincena de pruebas de proyectiles balísticos, incluyendo los misiles balísticos intercontinentales capaces de alcanzar el territorio de EEUU, y el ensayo de una bomba de hidrógeno.
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El líder norcoreano Kim Jong-un instó en su mensaje del Año Nuevo a acelerar la producción masiva de ojivas nucleares y misiles balísticos.